Navidades Conectadas | Conexión y Buen Ambiente Familiar
Ya tenemos las Navidades encima… apenas ha empezado diciembre y nos vemos envueltos en luces, árboles, catálogos y anuncios.
¿Eres de las que adoran estas fechas? ¿O te agobian?
¿Sueles disfrutarlas? ¿O sientes que te generan más tensión que ilusión?
Para gustos, colores, y es cierto que la Navidad suele ser de esas épocas del año que adoras o detestas, pero es raro que te dejen indiferente.
Tanto si estás en un bando como si estás en el otro, lo que es una realidad es que hay determinadas tentaciones, riesgos, y circunstancias que conviene tener en cuenta para que no haya desilusiones, chascos, malos entendidos o discusiones.
¿Qué nos impide pasar unas Navidades Conectadas?
La Navidad es un momento de mayor convivencia, ya que los peques están de vacaciones y los papás, habitualmente, también solemos disponer de algunos días.
Al igual que pasa en verano, es una fecha muy deseada por el descanso que supone que nos trae, pero a menudo no se cumple esta expectativa.
Es decir, que podemos vernos envueltos en inercias de desconexión por alguno o varios de estos motivos:
- Roces de convivencia: más tiempo juntos y ociosos, a menudo trae más puntos de desacuerdo.
- Peleas entre hermanos: mucho tiempo juntos que a menudo se traduce en más discusiones y desencuentros entre los hermanos.
- Sobre-estimulación: los niños en esta época suelen tener muchos estímulos ya que estamos constantemente bombardeándoles con eventos, actividades, cartas a Papá Noel, a los Reyes Magos, visitas a familiares y amigos…
- Consumismo: aunque no seamos conscientes, también los adultos nos vemos envueltos en una necesidad de consumir, de hacer, de planificar… y nos vemos a veces desbordados por todos estos frentes.
- Autocuidado: soñamos con tener unos días libres, de descanso, pero la realidad después es que no es sencillo encontrar esos espacios para cuidarnos y atender nuestras necesidades.
- Decisiones: si vivimos en pareja, a menudo se generan muchos roces sobre cómo y dónde pasamos estas fiestas. Los compromisos familiares y las tradiciones de cada uno, a veces no encajan bien y se producen discusiones cuando toca tomar una decisión al respecto.
- Coherencia: es frecuente que tengamos una idea de cómo queremos pasar estas Navidades basándonos en las experiencias vividas en la anterior. Sin embargo, llevados por la corriente, nos vemos un año más celebrando con excesos que no queríamos cometer, rodeados de gente con la que no nos apetecía estar…
En definitiva, mucha intensidad en muy pocos días que puede hacer que las idílicas vacaciones que nos hemos dibujado, acaben siendo un período agotador y estresante.
Por ello es fundamental “vacunarnos” antes de que el ritmo frenético de estas fechas nos lleve por un camino que no queremos.
Es importante ser conscientes de que en Navidad, a pesar de lo que en el fondo significan estas fechas, podemos acabar generando y viviendo sumergidos en un mal ambiente familiar que no deseamos.
La anticipación y la comunicación van a ser nuestras grandes aliadas en este sentido, así que te invito a ser muy honesta contigo misma y a que desgranes, cuanto antes, cómo quieres celebrar las Navidades.
Quizás esta sea una gran oportunidad para pasar a la acción y disfrutar de verdad de estas fechas:
- Acompañando mejor las peleas entre hermanos.
- Sosteniendo las emociones que surgen con motivo de la sobre-estimulación.
- Haciendo un consumo consciente para dar valor a los regalos.
- Comunicándonos de manera asertiva y no violenta con nuestra pareja y familia para poder expresar nuestras necesidades y deseos.
- Dejando de compararnos con otras familias y centrarnos de verdad en los nuestros.
- Poniendo coherencia y consciencia en cómo quiero vivirlas.
- Priorizándome para poder cuidarme.
¿Te apetece compartir y aprender cómo vivir unas Navidades en Conexión?
El próximo día 16 de diciembre a las 21:30 nos vemos en un Webinar Gratuito para hablar de todo esto y mucho más.
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Gracias como siempre por acompañarme y estar.
JUNTAS, sumamos.
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